¿Eres de las personas a las que le sangran cuando bes ke la jente ezkrive haci? ¿Tu primer impulso es insultarlos… corregirlos antes de que sigan causando daño a nuestro idioma? Pues bien, reprime tus impulsos, pues esto es algo que debes evitar y aquí te explicaremos por qué.
La segunda en cambio, es la realización específica de una lengua, que se puede dar al nivel de una región o un grupo social o simplemente al nivel de un individuo. El habla es, para decirlo de una manera más simple, una forma de hablar en particular, dentro del marco general de la lengua.
Nadie jamás llega y saluda diciendo: “Salutaciones, mi muy respetable amigo, ¿cómo se halla su ánimo en esta cautivante víspera?”. No al menos en este siglo.
La variante, mucho más real para iniciar una conversación con un amigo, sería un simple: “Hola”, porque con eso basta para abrir el canal de comunicación. Aunque si se encuentra frente a una figura de autoridad o en un ámbito más formal, quizá cambie el “hola” por un más formal “buenas tardes” y tal vez usará el reverencial “usted” en lugar de “tú”.
La ortografía y la gramática son un ejemplo, no todos las conocen porque dentro de su contexto nunca ha sido relevante, pero es importante aprenderlas porque nutre nuestras expresiones y podemos cambiar de registro lingüístico sin tropiezos ni errores. Una vez que dominemos estas normas, podemos alterarlas para dar riqueza a los discursos; un ejemplo sería el lenguaje literario que suele modificar significados, sintaxis y hasta crea nuevas palabras.
La respuesta es simple: Depende del contexto.
Lo primero que debes atender es que, así como hay momentos en los cuales te diriges a otras personas con las que ya tienes cierta confianza y en otros no, también ocurre lo mismo en la escritura. No es lo mismo escribir una carta solicitando un empleo que escribir un saludo en Whatsapp.
En el primer caso definitivamente deberías usar los dos signos de interrogación, pero en el segundo, por influjo del inglés, escribirás el de cierre nada más. Es decir, esos errores como preferir el espacio a la coma, no poner puntos, el uso de emojis u otras pueden deberse únicamente al contexto o porque ya conocen las normas y prefieren no seguirlas conscientemente. Sin embargo, si el contexto es mucho más serio, entonces sí deben hacerse los comentarios pertinentes.
Lo mismo ocurre con la escritura, el reto para los que conocen a la perfección las normas es guiar a aquéllos que no, pero de manera respetuosa y educada. Así demostraríamos que, en efecto, conocemos tan bien las normas que podemos ablar azí :v y hablar así, con el fin de ayudar a otros.